Formación basada en valores: un modelo pedagógico propio
Basándonos en el modelo educativo “Enseñar a aprender” creamos un entorno de aprendizaje continuo mediante un modelo pedagógico propio que capacite a los profesionales para seguir aprendiendo a lo largo de toda la vida, “aprender a aprender”, y que les permita permanecer receptivos a los cambios conceptuales, científicos y tecnológicos que vayan apareciendo durante toda su actividad laboral. Se fomenta pasar de un modelo basado en la acumulación de conocimientos a otro fundamentado en una actitud permanente y activa de aprendizaje.
En este contexto, las teorías sobre educación de adultos, en general, asumen que las personas mayores confían en sus experiencias como fuente importante de motivación para aprender y que, por otra parte, se estimulan más para aprender por un problema que por un tema (“enseñanza basada en problemas”). Se enfatiza, además, el concepto de aprendizaje auto-dirigido, el cual destaca que el que aprende no sólo debe ser el foco del proceso sino el conductor de su proceso educativo, planteando una enseñanza centrada en el estudiante. En los principios de la educación de adultos la experiencia previa es la mejor fuente educativa y el aprendizaje que se puede poner en práctica inmediatamente es el más valorado.
El objetivo de nuestra metodología es desarrollar competencias y habilidades a nuestros alumnos que les permitan desarrollar todo su potencial para aplicarlo a su profesión y crear aprendizajes significativos que conecten la dimensión cognitiva y emocional, haciendo que sea un proceso formativo integral.
De esta forma conseguimos que:
> Los alumnos adquieran aptitudes, actitudes y habilidades mediante los talleres y simulaciones de casos reales.
> Se fomente la investigación mediante la lectura de artículos científicos, búsqueda de bibliografía, visual abstrac, resolución de casos prácticos,..
> Tutorización online y offline personalizada
> Atención integral al alumnado.
> Actividades transversales competenciales.