En el mercado actual no vale solo con una titulación superior
Ana Céspedes, Líder Global de Market Access y Pricing en Merk KGaA y Coordinadora del Máster en Market Access en el Sector Salud, habla sobre la situación del sector y su futuro
1. Según los últimos datos de la Encuesta sobre Actividades de I+D de Farmaindustria ha habido un crecimiento del 1,1% en 2015 en el personal empleado en esta área. ¿Cómo crees que ha sido la situación laboral en el sector durante 2016? ¿Hay posibilidades de seguir creciendo?
“Después de varios años especialmente duros para la industria, debido a la situación económica, parece que la recuperación se va consolidando y que seguirá esa tendencia en este año. Según datos de Farmaindustria, en 2017 se recuperarán los 60.000 millones de euros de gasto sanitario que tenía España en 2010. Además, el gasto farmacéutico por receta crecerá un 0,5 por ciento en 2017, hasta los 9.917 millones de euros. La previsión es que el gasto farmacéutico público total se incremente un 0,9 por ciento en 2016, hasta los 16.324 millones de euros. Un informe elaborado por el Instituto de Investigación Económica Independiente Wifor, que analizó 7 compañías farmacéuticas a petición de Efpia, señala que la industria farmacéutica en Europa se muestra como uno de los sectores clave en la recuperación económica continental y en el aporte en el crecimiento de los indicadores macroeconómicos. El documento refleja que solo con las actividades comerciales de las siete empresas seleccionadas se mantienen cerca de 865.000 puestos de trabajo. De estas, 153.027 personas son empleadas directamente por la industria, mientras que 711.661 empleos son generados indirectamente. Esto significa que se aportan unos 5 puestos de trabajo adicionales para cada trabajo creado por la industria farmacéutica, convirtiéndolo en el multiplicador más grande de cualquier sector de la industria. El informe señala además que mientras la Comisión Europea ha establecido un objetivo de gasto en I + D del 3% del PIB en 2020, las empresas farmacéuticas del análisis han reinvertido el 17,4 por ciento, seis veces más de lo estipulado por Bruselas”.
2. Según este mismo informe, en un porcentaje del 86% los trabajadores están cualificados con una titulación superior. ¿La industria busca cada vez más a personal altamente cualificado?
“Somos una industria que dependemos tremendamente del capital humano. En el mercado actual no vale solo con una titulación superior, en nuestro sector valoramos la especialización como algo fundamental. Por otro lado, no hay que obviar otros aspectos que deben ir unidos al currículo, los expertos señalan que las cualidades más apreciadas por las compañías farmacéuticas en sus responsables senior son la adaptabilidad, la autogestión eficaz y el autodesarrollo”.
3. Pese a lo que se ha comentado en los últimos años sobre la inversión que en España se hace para I+D, Farmaindustria señala que en 2015 se produjo un incremento del 5,7%. ¿Crees que la tendencia en 2016 ha sido esta?
“Volviendo a la recuperación de 2016, sin duda desde la industria hemos puesto de nuestra parte también en inversión en investigación. A pesar de la reducción en las ventas, hemos recuperado las cifras inversión en I+D farmacéutica. Con más de 1.000 millones, el sector farmacéutico consolida su liderazgo en I+D industrial en España. Además, es una de las principales industrias exportadoras y somos el principal impulsor de la colaboración público-privada”.
4. Según el último informe de rentabilidad de la I+D farmacéutica de Deloitte, ésta ha decrecido por sexto año (2016) consecutivo en un 3,7%. ¿Quiere decir que pese a los esfuerzos realizados en inversión hay algo que falla? ¿Podría tener influencia la desaparición de fármacos con ventas superiores a los 1.000 millones de dólares, también conocidos como fármacos Blockbuster?
“Llevamos años con previsiones que indican que la falta de grandes blockbusters podría provocar la desaparición del modelo de ventas masivo tradicional. Es un cambio frente al cual tenemos que estar preparados. La respuesta es ir hacia un modelo de creación de valor para todos los stakeholders de la industria farmacéutica. Sin duda el sector está ya trabajando en esta línea, buscando nuevas fórmulas de colaboración, ofreciendo un valor añadido a sus productos y proporcionando datos reales sobre resultados, avanzando en Real World Evidence, porque estamos en la era de los resultados. Las políticas de ajuste de precios con reducción de costes, el fomento de genéricos y biosimilares o incluso las rebajas forzadas en las negociaciones de precio y reembolso no parecen ser sostenibles, por lo tanto, tenemos que ir hacia la negociación con pagadores para buscar métodos como el riesgo compartido o el pago por resultados. Asimismo, es necesario especializarse, saber focalizarse en las áreas que la compañía quiere desarrollar. Además, hay que tener la capacidad de moverse hacia mercados con más margen de crecimiento como pueden ser los países emergentes. Otra tendencia que claramente se está fomentando son las alianzas estratégicas entre compañías, acuerdos de colaboración, que abren la puerta a la comercialización conjunta de productos”.
5. No todo son malas noticias, en 2016 se ha reducido el coste de desarrollo de nuevos medicamentos ligeramente. ¿Crees que cada vez se está consiguiendo mayor eficiencia en el proceso de desarrollo y lanzamiento de medicamentos? ¿Cuáles son las claves?
“Estamos dirigiendo nuestros pasos a un laboratorio más eficiente y productivo. Según el informe Pharma 2020: The Vision, publicado por Price Waterhouse Coopers (PwC), los expertos predicen que el proceso de investigación y desarrollo de fase lineal que se aplica actualmente dará paso a pruebas in-life y a la concesión de licencias, en colaboración con reguladores y proveedores de atención médica. Debemos acortar al máximo al máximo la distancia entre las fases de registro y acceso al mercado”.