La presidenta subraya el nuevo edificio del 12 de octubre como un “ejemplo de fortaleza” e hito del 2023
En un año marcado por desafíos inesperados y cambios significativos, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha compartido un exhaustivo balance del 2023, enfocándose en los notables logros y desafíos del ámbito sanitario. En su discurso, destacó que la salud se ha convertido en protagonista indiscutible y ha subrayado los “logros sanitarios” que sitúan a Madrid “a la cabeza de toda España”.
Uno de los hitos mencionados por la presidenta es la culminación de la mayor obra sanitaria de Europa, el nuevo edificio del 12 de Octubre, y el reconocimiento al mejor quirófano del mundo, localizado en el Hospital Universitario Gregorio Marañón. Díaz Ayuso se enorgullece de que los centros sanitarios madrileños constantemente lideran todos los rankings, evidenciando la excelencia y la calidad de los servicios de salud en la región.
Mirando hacia el futuro, la presidenta anticipa que la digitalización de los servicios públicos marcará el año 2024, destacando la implementación de la historia social única. Este avance no solo agilizará trámites, sino que también mejorará los diagnósticos y personalizará los servicios sociosanitarios, contribuyendo a una mayor eficacia.
No obstante, Díaz Ayuso también ha expresado su preocupación por las adicciones a las drogas y las pantallas. Madrid se propone ser un ejemplo nacional e internacional en la implementación de “actuaciones bien meditadas, ejecutivas, prácticas y eficaces” para combatir estas adicciones y ayudar a la juventud y a la población en general.
En cuanto a la inversión para el próximo año, la presidenta anuncia una asignación significativa, con más de 10 millones de euros destinados a la sanidad. El 90 por ciento de los nuevos presupuestos se dirigirá a políticas sociales, consolidando así la posición de Madrid como líder en sanidad, educación, políticas familiares, servicios sociales, vivienda y transporte.
En un gesto de reconocimiento, Díaz Ayuso agradece el arduo trabajo de todos aquellos que “garantizan el funcionamiento de los servicios esenciales”, con especial énfasis en los profesionales de la salud que han enfrentado desafíos sin precedentes.
Sin embargo, la presidenta también señala que el año ha sido “políticamente agridulce”, resaltando la agitación en España y expresando su agradecimiento por la confianza depositada en ella en las elecciones de mayo. Lamenta la promulgación de la amnistía, que, según ella, fomenta la desigualdad y el enfrentamiento, subrayando la importancia de defender la Constitución para evitar divisiones y promover la concordia y la libertad.
En última instancia, Díaz Ayuso hace un llamado a los madrileños para mejorar el legado histórico y cultural de la comunidad, con la intención de dejar una herencia sólida y próspera a las generaciones futuras. La presidenta reitera su compromiso con la concordia y la libertad, afirmando que en la región no hay espacio para el resentimiento y abogando por una sociedad unida para superar los desafíos del presente y construir un futuro prometedor.
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