La creciente demanda asistencial, el incremento en las denuncias y la imposición de papeleo basado en una medicina defensiva, llevan a los médicos a situaciones estresantes que pueden favorecer un agotamiento profesional.

El incremento de papeleo es uno de los principales favorecedores del síndrome de agotamiento profesional entre los médicos. Por cada hora que un médico pasa con sus pacientes, pasa cerca de dos horas escribiendo informes, documentado llamadas telefónicas, solicitando pruebas complementarias, revisando resultados, contestando a peticiones de los pacientes, recetando medicación y comunicándose con otros miembros del equipo. Todo este trabajo, no se cuantifica ni está remunerado.

Se ha descrito el doble de agotamiento profesional entre médicos respecto a otras profesiones,  con más de la mitad de los médicos padeciendo síntomas del agotamiento profesional como: agotamiento emocional, despersonalización o disminución de la satisfacción personal relacionada con estrés laboral.  Entre los más afectados, se encuentran aquellas especialidades “en primera línea” como pueden ser medicina interna, medicina de familia, medicina de urgencias y neurología.

Se ha visto entre los afectados un mayor índice de uso de sustancias de abuso, depresión y suicidios (400 médicos al año en EE.UU.). También se ha descrito mayor posibilidad de cometer un error médico importante y menor índice de satisfacción por parte de sus pacientes. Produce, por lo tanto, consecuencias a nivel del personal sanitario y de ineficiencia del sistema con pérdidas en productividad e incremento de gastos.

Parece que existe una creciente concienciación del problema pero es difícil de abarcar desde una sola organización, incluso las causas son difíciles de estudiar de una forma sistemática y colectiva.

En 2013 la Clínica Mayo inició un programa para mejorar el bienestar de sus trabajadores con encuestas anuales de satisfacción personal y sobre el liderazgo de sus supervisores directos. Se vio que existía una relación lineal inversa entre la empatía, compromiso y colaboración de sus supervisores directos y el agotamiento laboral.

En 2015  Servicio de Medicina de Familia de la Universidad de Colorado realizó un estudio (APEX) en el que se aumentaba el equipo de soporte los médicos de familia, centrando sus labores en explorar, diagnosticar y tratar al paciente, liberándolo de las tareas aledañas. En 6 meses, el agotamiento profesional disminuyó un 40%, la tasa de vacunación mejoró y aumentaron las derivaciones para mamografía y colonoscopia. A pesar del aumento del coste inicial por incremento de personal, el aumento de productividad que permitió que cada médico viera 3 pacientes más al día, disminuyendo las listas de espera, resultó en un coste neutro. Este sistema posteriormente se extendió a otros centros de salud y plantas de medicina interna.

En 2017 una serie de asociaciones médicas americanas han creado una Acción Colaborativa para el Bienestar de los Clínicos con los siguientes objetivos: concienciar del estrés y agotamiento, mejorar las bases de las organizaciones de la salud partiendo del bienestar de los profesionales, identificar soluciones basadas en la evidencia y monitorizar la efectividad de las mismas. Más de 100 organizaciones se han ido sumando a esta iniciativa desde su inicio.

El importante compromiso por parte de tantas organizaciones para disminuir el agotamiento profesional y promover el bienestar, junto con los resultados prometedores de los más emprendedores en este tema son motivos para ser optimistas.

Fuentes:

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/29365296

https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pubmed/29365301