Descubre cómo la exposición al litio en el agua potable puede afectar la salud mental infantil
El litio es un oligoelemento natural que se ha utilizado en psiquiatría durante mucho tiempo como estabilizador del estado de ánimo. Aunque ha demostrado ser efectivo en el tratamiento de diversos trastornos psiquiátricos, como el trastorno bipolar, también ha sido objeto de controversia debido a sus posibles efectos adversos sobre la salud fetal. La exposición materna al uso terapéutico del litio ha sido asociada en algunos estudios con abortos espontáneos y malformaciones cardíacas en la descendencia. Además, se ha demostrado que el litio modula una vía molecular implicada en el neurodesarrollo y el autismo en el cerebro.
Análisis de casos y controles: ¿Qué revela el estudio sobre la exposición al litio y el autismo?
Un nuevo estudio nacional realizado en Dinamarca y publicado en la revista JAMA Pediatrics ha encontrado una asociación entre la exposición materna estimada a niveles más altos de litio en el agua potable y un mayor riesgo de trastorno del espectro autista (TEA) en la descendencia. El estudio, que incluyó a 8.842 niños con diagnóstico de TEA y 43.864 niños de control emparejados por año de nacimiento y sexo a partir de registros daneses, utilizó direcciones residenciales maternas geocodificadas para estimar la exposición materna al litio en el agua potable.
El estudio encontró que cada aumento intercuartílico en la exposición materna estimada al litio en el agua potable se asoció con un 23% más de probabilidades de TEA en la descendencia, mientras que el cuartil más alto de exposición materna se asoció con un aumento del 46% en el riesgo de TEA en la descendencia. Aunque el estudio tiene algunas limitaciones, como su diseño observacional y la estimación de la exposición materna en lugar de medirse directamente, sus resultados sugieren que la exposición materna al litio en el agua potable podría ser un factor de riesgo para el TEA.
Estos hallazgos tienen implicaciones importantes para la salud pública y la política de salud. Los profesionales de la salud deben informar a las mujeres embarazadas sobre los posibles riesgos de la exposición al litio, tanto en el contexto del tratamiento psiquiátrico como de la exposición ambiental. Además, se necesitan estudios adicionales para comprender mejor la relación entre la exposición materna al litio y el riesgo de TEA, y para identificar las posibles medidas de prevención y reducción del riesgo. En última instancia, se necesita una evaluación cuidadosa de los riesgos y beneficios del uso del litio en la práctica clínica, especialmente en mujeres embarazadas o en edad fértil.